Mi honda preocupación por los siniestros planes de los científicos grises alojados en Berlín me ha llevado a reunirme con científicos de alto nivel que trabajan con los ganadores del premio Nobel de Física de este año. Para protegerles de las garras de la opresiva Academia sus nombres permanecerán en el más absoluto anonimato. Con todos ellos el tema acabó siendo la amenaza muy real de la IAs de la que nos advirtió la tecnomaga Gwen Marsters y en cada ocasión el comentario fue el mismo: "La clave es el grafeno." Este material bidimensional formado por átomos de carbono es lo que posibilita que nuestros enemigos están aplicando sus conocimientos de inteligencia artificial, un material más tosco daría lugar a IAs ineficientes y lentas. Por eso debemos estudiar el grafeno y emplearlo para desarrollar contramedidas. Las Resistencia con la colaboración de los Hijos del Nuevo Mundo ya está manos a la obra. El futuro se decide en la mesa de un laboratorio, entre capas de átomos.
¡Por Isis!
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