Resulta entre entrañable e hilarante ver cómo la Ciencia Oficial siempre va con un enorme retraso, anunciando como gran descubrimiento lo que los investigadores de lo desconocido ya confirmamos más allá de toda duda hace décadas. Un equipo del Departamento de Biología Molecular de la Universidad de Harvard compuesto por Malcolm W. McGeoch, Sergei Dikler y Julie E. M. McGeoch ha encontrado una proteína de origen extraterrestre en Acfer 086, un meteorito encontrado en Argelia en el año 1990. La proteína compuesta por hierro y lito ha recibido el nombre no precisamente original de hemolitina. Afirman ufanos que su hallazgo prueba que las proteínas no precisan de agua para formarse y que es un paso hacia el descubrimiento de vida fuera de la Tierra.
Pobres investigadores que trabajan con una venda en los ojos. La Tierra está llena de formas de vida alienígenas infinitamente más complejas que esa humilde proteína, y yo me congratulo de haber tratado con algunas de las más insignes y contarlas entre mis amistades. Incluso ahora, escribiendo desde el interior de unas instalaciones nucleares iraníes, no preciso más de un momento para mostrar lo insignificante que este descubrimiento revolucionario. ¿Acaso se pasaron el año que nos gobernaron los Grises durmiendo o encerrados en su laboratorio? Pues es hora de despertar y salir a algo más que mantener el puesto de trabajo repitiendo los dogmas de la corrupta y decadente Academia. Aquí seguiremos aportando nuestro grano de arena, día tras día.
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