El silencio tras el día del suceso que convirtió el cielo de Nueva York en un efecto especial de una gran superproducción de Hollywood es tan absoluto que no cabe pensar más que la corrupta y decadente Academia ha sacado la artillería pesada para que no se hable del tema. Si uno busca, parece que los medios sólo informaron ese día, lo justo para negar la participación de alienígenas y hacer algún comentario chistoso usando escenas de películas icónicas como Los cazafantasmas, Independance Day o Los Vengadores. Mas nada de enjundia. La única explicación que dan es la oficial, la explosión de un transformador. Algún valiente apunta a que el transformador (transformer) podría ser uno de esos robots extraterrestres que pueden cambiar de forma. Sería una gran publicidad para la nueva película de la franquicia, mas me temo que esos alienígenas no están involucrados. Y digo esos porque estoy convencido de que sí hubo alienígenas tras ese espectáculo de luces. Una o más naves de otro planeta sobrevolaron Nueva York y crearon esa luz azul, para al mismo tiempo concentrar la atención de todo el mundo y distraerla de su meta, tomar tierra. Ah, pero esta hipótesis mía plantea otro dilema. ¿De qué lado están? ¿Son invitados de la vil Academia como lo fueron antaño los mezquinos Grises y la censura académica es una forma de ayudarles, una omertá entre amigos o son fugitivos de esas fuerzas del mal? Habrá que seguir indagando.
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