viernes, marzo 14, 2008

La lágrima de sangre de Yurrnah Parte I

Dramatis personae

Los Héroes: Patrick Von Steiner, Jenna Starblade, el Bibliotecario, Rob Larroca, Esteban Marín y Elric de Melniboné.

Los Villanos: esbirros variados de la Academia.

El Lugar: Almacén secreto de la Academia en El Cairo, Egipto.

El Momento: 14 de marzo del 2008

El portal era como un pozo de los deseos, abierto ante nosotros rebosante de promesas. Con la emoción a flor de piel propia del que va a viajar a lo desconocido me dejé caer, liderando el grupo de intrépidos héroes. Mis pies tocaron suelo en un oscuro pasillo débilmente iluminado por unos tubos fluorescentes. Las paredes eran de un blanco aséptico e impersonal. Un logo de los muchos de la Academia adornaba cada rincón remarcando el lugar como propiedad inalienable. Con nuestro objetivo en mente avanzamos con sigilo por el laberinto de pasillos que conformaba el almacén, A ambos lados había puertas por doquier con símbolos en lenguas de mil planetas. Pensar en los tesoros que acumulaban polvo en esas estancias, en las innumerables pruebas de la influencia de los extraterrrestres en nuestro planeta y saber que no podía detenerme a observarlos, a sacarlos a la luz me reconcomía por dentro.

No obstante pronto tuve que apartar esos tristes pensamientos de mi cabeza pues una gárgola se cruzó en nuestro camino. Sus ojos era rojos como rubíes, su boca se abrió en una mueca desagradable.

-Así que has venido, eres tan tonto que tras anunciarlo públicamente te presentas aquí como el vulgar ladronzuelo que eres.

-En la Academia veis estupidez donde hay valentía pues desconocéis lo que es el arrojo del guerrero.

Su única respuesta fue una risa estridente. Otra gárgola se asomó por el otro extremo del pasillo acompañada de dos nigromantes, que sin pronunciar palabra comenzaron a agitar sus manos siguiendo rituales arcanos. Elric, maestro de las artes mágicas nos hizo una señal para que formáramos una piña, espalda contra espalda. Había algo en su mirada que transmitía el desazón de saber que era demasiado tarde para detener los conjuros que estaban formulando.

La situación era crítica. Mi buen amigo el Bibliotecario manteniendo la calma como sólo él sabe hacer aportó un rayo de esperanza, el amuleto estaba muy cerca. Elric y él estaban seguros que en el siguiente pasillo estaría la puerta.

Sosteniendo mi pistola de tecnología extraterrestre con firmeza me preparé para hacer frente a los académicos. Para mi sorpresa se mantenían en sendos extremos del pasillo. De repente las paredes se abrieron como si alguien o algo las desgarrara y una marea de cadáveres muy animados y armados de los pies a la cabeza inundó el pasillo.

Continuará...

3 comentarios:

  1. Esta última escena tiene toda la pinta de ser una alucinación, no sé si por embrujo o por orujo.

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  2. La verdad no se que pensar pero hay que reconocer que tienes una imaginación muy creativa y una buena forma de redactar tus historias.

    No quiero ser aguafiestas pero vine a demostrar que las gárgolas son puramente una invención de los medievales.

    Las gárgolas como una invención del ser humano.

    Gárgola procede del Francés, de la palabra "gargouille", que deriva del latín gargula (garganta) La palabra gargouille se refiere al ruido que se produce al pasar un líquido por un tubo, por ello a las primeras gárgolas se les llamaban "grifos". Pero todas las gárgolas de piedra no son representadas por meros grifos (la palabra grifo proviene de la mitología griega, era un animal con cabeza de águila y cuerpo de león) solían ser siempre seres fabulosos, monstruosas, horribles, irónicas, infernales, con formas de animales, humanas o mezcla de las dos, con muecas burlonas, con expresiones deformes, con posiciones poco estilosas, arrojando el agua por sus orificios: escupiendo, vomitando, llorando, orinando... Aunque las gárgolas de piedra tengan funciones decorativas y simbólicas, su principal destino era evacuar el agua. La idea de una proyección decorativa por la que el agua fuera expulsada del edificio ya era conocida desde la antigüedad, siendo utilizado por egipcios, griegos, etruscos y romanos. Estos últimos fueron los que más utilizaron las gárgolas como desagües decorativos, como se puede ver en la ciudad de Pompeya.

    http://www.estecha.com/gargolas-piedra.htm

    ATT: Espectro A.

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