Cuando un artículo presuntamente serio empieza negando la posibilidad de una intervención alienígena, es evidente que estamos ante un lacayo de la corrupta y decadente Academia. "Ni 'aliens' ni apocalipsis", dice este aspirante a académico de tres al cuarto, están tras el color morado del cielo de Madrid que sorprendió a sus habitantes. Luego da una explicación oficial tan insípida que sólo puede haber salido de los archivos más rancios de la Academia. El reflejo de las luces de la ciudad en las nubes vía dispersión de Rayleigh les habrían dado ese inquietante color. Nosotros en cambio, tuvimos la suerte de ver esta misma semana un cielo del mismo color en la tercera temporada de la serie de DC Comics Titanes, y ahí ese color tenía una explicación sobrenatural y participación alienígena. No entro en más detalles para no spoilear dicha serie, que podéis ver en Netflix. Entre la versión de la ciencia ortodoxa y la Cultura Pop, no tengo duda de cuál me parece más verosímil. ¿Qué opináis vosotros?
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