A los tres homúnculos imitadores del maestro del disfraz que están encerrados en unas mazmorras de la Academia, se le suman ahora dos que ha avistado la ciber guerrera Masuimi Max en las Vegas. Por lo que sé de esa ciudad, no me extraña lo más mínimo. Ahora tengo claro cuál va a ser mi próxima misión. Hacerme con uno de esos homúnculos. Está claro que es la mejor forma de enterarme de qué está pasando. En Daikokuten tenemos los medios para descubrir el origen de estas criaturas y la voluntad de sacar la Verdad a la luz sea cual sea.
Si alguien se interpone en nuestro camino, puede que termine en mi colección de souvenirs. Como dice el dicho, el que avisa no es traidor. Si no queréis problemas, manteneos al margen de nuestros asuntos. Si queréis formar parte del Nuevo Mundo, enviad una solicitud y veremos si sois dignos. No aceptamos a cualquiera en la Utopía soñada por el finado Sir Edward Holst y dirigida por mi jefa Ellen Blackmoon.
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