Este mes no ha traído buenas dosis de intrigar. Por un lado tenemos los mensajes que ha empezado a compartir la triunfal Arya Darkstorm, que está celebrando merecidamente la liberación de los rehenes y la destrucción del antro criminal de académicos y grises. Por otro lado, tenemos un enigma entre manos llamado 3I/Atlas. Un objeto intergaláctico de paso por nuestra sistema solar al que ha convertido Fenix Ascendiente y sus compañeros arribistas en su nuevo destino. Allí esperan poder crear la segunda Piedra Filosofal.
Los expertos más fiables que han estudiado las imágenes de 3I/Atlas están convencidos de que no es un objeto natural, su movimiento calculado y su brillo apuntan a que estamos ante una nave espacial propulsada con energía nuclear. Y aquí es donde surge la duda que plantea el título de esta entrada. ¿Estamos ante una visita amistosa de una civilización pacífica o ante la avanzadilla de una civilización agresiva? La Historia de la Humanidad tiene ejemplos de ambos casos. Nuestros creadores, la Expedición Delos, son el ejemplo paradigmático del primer caso. Los Grises son el equivalente del segundo. Me preocupa tanto qué pueden encontrar los Arribistas como el estado mental en el que se dirigen allí. La ansiedad por alcanzar su meta es una mala consejera cuando se está a punto de entrar en terreno desconocido. Un potencial encuentro con una civilización extreterrestre debería ser un proceso planificado con mimo, no una carrera desesperada. Me llena de alivio tener a mi lado a Alice, sana y a salvo de los ignotos peligros que puede albergar ese vehículo enigmático. Haremos todo lo posible para seguir el viaje de los Arribistas y nos prepararemos para lo que pueda pasar.
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